Un golpe al movimiento obrero bellvillense - Prof. Bárbara Bomone
13.03.2014 16:58Revista N° 2 - Año 2 - Febrero/Marzo 2014
"Nuestras clases dominantes han procurado siempre que los trabajadores no tengan historia, no tengan doctrina, no tengan héroes ni mártires. Cada lucha debe empezar de nuevo, separada de las luchas anteriores. La experiencia colectiva se pierde, las lecciones se olvidan.La historia aparece así como propiedad privada cuyos dueños son los dueños de todas las cosas. Esta vez es posible que se quiebre el círculo..." Rodolfo Walsh (Periódico de la CGT de los Argentinos. Mayo de 1968).
La historia del movimiento obrero de Bell Ville y la región es, todavía, una tarea pendiente. La dignificación del trabajo en todas sus formas y la democratización de las relaciones sociales permanecerán como conquistas atribuibles a las prolongadas y duras luchas libradas por los trabajadores organizados en puja por sus derechos. Por estos lados del Sur de nuestra provincia, poco hemos avanzado en la reconstrucción histórica de ese difícil proceso. Salvo algunas excepciones, la historia de los trabajadores de nuestra zona no se ha constituido en objeto de estudio e investigación académica.
Haciendo hincapié en la ofensiva anti-sindical del llamado “Proceso de Reorganización Nacional”, la más global y prolongada, la más sanguinaria de las registradas en el siglo XX en nuestro país, analizaremos en el presente artículo el impacto del Golpe de Estado de 1976 en la vida sindical bellvillense y la puesta en vigencia de las prácticas propias del Terrorismo de Estado en nuestra ciudad.Apelamos a la memoria como herramienta fundamental de análisis, rescatando las voces que el Terrorismo de Estado intentó silenciar, asumiendoel desafío de evitarlas reducciones simplistas que impiden comprender estos procesos locales en toda su diversidad y complejidad.[1]
Antecedentes históricos: tres grandes etapas
Analizando las acciones y actividades del movimiento obrero bellvillense a largo del siglo XX, podemos ver las conquistas alcanzadas desde su nacimiento hasta su organización como tal. Los documentos consultados y registros orales nos han permitido reconstruir, tentativamente, los momentos históricos del desarrollo de este movimiento durante el pasado siglo, que dividimos en tres grandes etapas:
1- Una primera etapa, comprendida entre los años 1930 -1945, caracterizada por expresar las primeras tentativas de crear una organización sindical estructurada en base a los oficios. Marcada por el protagonismo local del “Sindicato de Oficios Varios”, la primera organización sindical de la zona con vinculaciones políticas con el Partido Comunista de nuestra localidad. Más adelante, llegada la década del ’40, el movimiento obrero avanzó en su organización cuando se conformó la “Unión Obrera Local”, liderada por Salvador Ponce, con el fin de unir a todos los trabajadoresde nuestra ciudad y sus reclamos sectoriales[2]. Los métodos de protesta de los obreros registrados en diferentes notas periodísticas implicaban huelgas, mitines y boicots, como modos de acción directa para obtener la vigencia de lo que los obreros bellvillensesentendían eran sus“derechos laborales”.[3]
(2) Una segunda etapa, comprendida entre los años 1945-1976, caracterizada por la conformación de la “Junta Sindical del Departamento Unión” y la apertura de un proceso histórico de redefinición de las identidades políticas de los trabajadores bellvillenses ante la emergencia del peronismo, ya sea su adhesión u oposición al mismo. Con posterioridad veremos en esta misma etapa el nacimiento y protagonismo de la “CGT Regional Bell Ville” propiamente dicha y una vinculación estrecha con la “CGT de Villa María”.
(3) En la tercera etapa, comprendida entre 1976 y 1983, el movimiento sindical de nuestra localidad fue objeto de una fuerte persecución en el contexto de vigencia del Terrorismo de Estado en nuestro país.Esta etapa abordaremos más detenidamente a continuación.[4]
Los sindicatos y el Terrorismo de Estado en Bell Ville
A través de los testimonios recogidoses posible entender, que la participación y organización de los trabajadores en una CGT Regional en la década de 1970 ya se venía desarrollando en nuestra ciudad. Varios eran los gremios que la conformaban: “ATE, LUZ Y FUERZA, COMERCIO, METALÚRGICOS, FATICA, SINDICATO DE LA MADERA, SINDICATO DE LA CARNE Y PEONES DE TAXI. Esto ocurría en la década del 70, con una participación destacada en nuestro medio tanto en acción como en gestión, teniendo estrechos vínculos con delegaciones de Villa María y Córdoba”[5].Producido el golpe en marzo de 1976, el funcionamiento y la actuación de la CGT Regional Bell Ville quedóseveramente afectada. Si bien algunos sindicatos como El S.U.O.E.M (empleados municipales) y “Luz y Fuerza” de nuestra ciudad siguieron funcionandode manera aislada y en su parte administrativa, la CGT Regional quedó formalmente disuelta ysu reorganización se concretó en 1982.[6]Es importante remarcar que, a pesar de la proscripción sufrida, algunos dirigentes sindicales mantenían reuniones clandestinas con sus afiliados, en el marco de lo que puede ser considerado como resistencias locales a la prohibición impuesta autoritariamente.
En este sentido, el ex dirigente lucifuercistabellvillense, Roberto Piacenza, remarcaba:“Además de habernos sacado el convenio, no nos podíamos reunir en ningún lado. No nos podíamos reunir porque estaba vedado, lo único que se podía hacer eran reuniones clandestinas. Y si no, lo único que se aceptaban eran reuniones para la obra social, con un veedor del Ministerio de Trabajo presente para que no se tratara otro tema. Pero nosotros como éramos organizados teníamos nuestros códigos y durante esas reuniones utilizábamos un lenguaje especial para tratar otros temas y que el veedor no se diera cuenta.También realizábamos reuniones en los lugares de trabajo que eran sectoriales para que no se visualizara mucha gente e ir tratando algún tema y se iba pasando de sector en sector, esa era la única manera que teníamos”[7].Además de la disolución de la CGT Regional, los trabajadores de nuestra ciudad –y los de todo el país- se quedaron sin la posibilidad de discutir con la patronal los “convenios colectivos de trabajo”.Al haber sido disuelta la personería gremial, los gremios no tenían representatividad para discutir aumentos salariales. No obstante la persecución y la prohibición, los trabajadores desarrollaron ciertas formas de resistencia.
Como uno de los rasgos distintivos del Terrorismo de Estado, se elaboró una política laboral coactiva tendiente a disciplinar y fragmentar un movimiento obrero, en especial el movimiento obrero de Córdoba, que había mostrado en los años inmediatos una alta capacidad de presión, movilización y negociación. Bell Ville no fue ajeno a esto,Pablo Álvarez, ex gremialista del S.U.O.E.M, secuestrado y detenido por la dictadura, nos decía: “Ser un gremialista en los años setenta, era tomar un posicionamiento político, ya que era una época muy politizada. Yo creo que el movimiento obrero sigue politizado, pero en aquel entonces este movimiento se proponía seriamente ser alternativa política y de poder, por eso se da lo que se da: El Cordobazo, El Rosariazo. […] O sea el hecho de que hayan estado más concientizados políticamente, los llevo a hacer esa lucha junto con los estudiantes, teniendo un carácter elevado, ya que no fue una lucha gremial reivindicativa sino que apuntaba a tumbar la dictadura de ese momento porque eran gobiernos antidemocráticos, como fue la dictadura de Onganía. Fue una lucha por la libertad, por los derechos y bien política y a su vez había relaciones con el movimiento obrero- estudiantil con distintas organizaciones políticos revolucionarias que apuntaban a la toma del poder, esa es la diferencia que veo con respecto a esta época, por eso también el movimiento obrero en esa época fue más golpeado”.
Las voces que intentaron callar
La clase trabajadora se vio afectada en este período por políticas represivas, laborales y económicas. Esta modalidad represiva de poder, se organizó de manera sistemática a partir del secuestro, la tortura y la desaparición forzada de personas. En Bell Ville consta laexistencia detres gremialistas que sufrieron el secuestro y la tortura posterior. Uno de ello, fue Pablo Álvarez, dirigente gremial - citado anteriormente - que estando preso en la cárcel de esta ciudad, fue víctima de torturas físicas y psicológicas:“primero estuve preso acá en Bell Ville en Avenida España, con varios compañeros como: Lucho Bondone, sus hijos, los Lacreu, el que era abogado con su hija también, Morosan Patricia,la abogada, también la que es profesora de inglés. En la cárcel de acá fue donde más me torturaron, teniendo en cuenta que el objetivo de la tortura era sacarte datos y a mí me encontraron revistas, diarios, nosotros en la organización política teníamos revistas pero que estaban a su vez en los kioscos; ‘No Tranzar’ se llamaba la revista; de la Vanguardia Comunista. Además tenía volantes que días antes del golpe repartimos, eran amarillos, eran “subversivos” porque llamaban a la gente a revelarse contra el golpe, entonces me encontraron volantes de esos, libros de Marx, de Engels, me agarraron con todo eso […]”.
Recordamos también a Humberto Rodríguez,militante político, gremial y social, con un fuerte compromiso con los trabajadores y los sectores populares de ésta ciudad. Miembro fundador de la “Comisión de Derechos Humanos de Bell Ville”, en la que participó activamente hasta su muerte, acaecida el 17 de octubre de 2006.Fue secuestrado el 24 de abril de 1976 en nuestra ciudad por un grupo de personas al mando del ex policía Antonio Reginaldo Castro para ser liberado en junio de 1979. Permaneció secuestrado en nuestra ciudad y fue trasladado posteriormente a Villa María, después al Centro Clandestino conocidocomo la “D2” (División de Informaciones de la Policía de la Provincia de Córdoba), también pasó por el Centro Clandestino“La Ribera”, para ser traslado después al Establecimiento Penitenciario del barrio San Martin (Córdoba) y, finalmente, al Establecimiento Penitenciario de la ciudad de La Plata, donde fue liberado en la fecha mencionada.
Otro sindicalista de activa participación en nuestra localidad fue Pedro Rodríguez, quien fuera secuestrado“sin explicación alguna”, como el mencionado anteriormente. Obrero de la construcción, delegado del sindicato de la U.O.C.R.A y simpatizante del Partido Comunista en nuestra ciudad. Haciendo referencia al desarrollo de las actividades en su gremio antes del “Proceso” nos decía:“No pertenecí a ningún partido político. Fui delegado gremial y armé la comisión del gremio de la UOCRA junto a otros compañeros. Nunca fui dos veces consecutivas delegado, luego de haber estado en ese cargo fui vocal. Yo no estoy de acuerdo con la reelección en los cargos o mandatos, porque si eso pasa el gremio se corrompe. Cuando estuvimos en la comisión, nos encargamos de realizar inspecciones, es decir íbamos al ministerio de trabajo y verificábamos si el “patrón” le pagaba o no al obrero, si hacían los aportes que le correspondían, es decir, yo colaboraba con el delegado”.Días despuésde producirse el golpe, su actividad sindical fue coartada, estando detenido durante un mesen la Policía de Bell Ville.“El gremialista era peligroso para el Estado, porque les abríamos los ojos a los obreros”.
La persecución a los abogados laboralistas
Conjuntamente a la persecución de dirigentes y delegados gremiales, se desarrolló en la ciudad de Bell Ville una persecución a algunos de los representantes legales más destacados del medio. Luis José Bondone, “Lucho”, una de las personalidades más relevantes del ámbito profesional, social y deportivo de Bell Ville, se destacó en varios planos del quehacer comunitario y por su inquebrantable lucha en defensa de los ideales democráticos y los derechos humanos. Fue asesor letrado de los gremios de la Carne y los municipales (SUOEM), asimismo colaboró el Círculo Médico de nuestra ciudad, con los madereros y los artesanos de la pelota de fútbol, entre otros.
En una entrevista realizada antes de su lamentable fallecimiento, con respecto a lo específico de su tarea con los gremios de la ciudad, Bondone dijo: “Mi colaboración era profesional, ya que ellos no tenían una organización. En esos sindicatos no se hacía militancia, no tenían rasgos políticos; sus miembros venían al estudio para consultas profesionales, exclusivamente. Recuerdo que yo les elaboré el estatuto profesional a los cocedores de pelotas de fútbol, una actividad que antes era muy divulgada en nuestra región llevada a cabo por muy buena gente, pero que no estaban convenientemente organizados. Redacté la Ley del Telegrama Obrero y se la dí al abogado Luis Vesco, que era un diputado nacional bellvillense, para que la presentara en el Congreso. De allí, se aprobó el “Telegrama Obrero”, un instrumento que todavía está vigente”.[8]Bondone fue secuestrado el 28 de marzo de 1976 en su domicilio particular junto a sus dos hijos, Mariano y Lisandro, y liberado en 1977 para ser nuevamente secuestrado en 1978, trasladado a “La Perla” y posteriormente liberado en el transcurso del mismo año.
Como vimos, es el presente el que convoca la memoria,y creando desde la Revista el espacio propicio para rememorar los hechos que hacen a lahistoriabellvillense, podemos reconstruir los olvidados que aportaron a la construcción de sujetos en lucha de nuestra localidad. Es de esta forma, que empezamos a construir una historia de los trabajadores, con sus luchas, logros y derrotas, dando forma a una experiencia colectiva de aprendizaje que no queda olvidada en algún rincón de nuestras calles. El Terrorismo de Estado en nuestra ciudad pretendió consolidar el olvido, nosotros –desde nuestro humilde lugar- buscamos reconstruir los procesos de los auténticos protagonistas para que, como decía Rodolfo Walsh,la historia no aparezca como propiedad privada.
[1]El presente artículo se elabora a partir de algunos resultados de nuestro trabajo final del Profesorado en Historia, titulado “Nacimiento y evolución del movimiento obrero en Bell Ville”.
[2] “¿Cuáles son los principios que sustenta la ‘Unión Obrera Local’ en nuestra ciudad?”. Diario La Mañana. Bell Ville, 7 de Julio de 1940. Pág.3. Salvador Ponce:fue uno de los primeros secretarios generales de la entidad sindical “Unión Obrera Local”, y perteneció al Partido Comunista de Bell Ville en 1940.
[3]Esta etapa del desarrollo del movimiento obrero en nuestra ciudad se construyó a partir de un exhaustivo análisis de fuentes documentales tales como el Diario La Mañana, redactado por Ernesto Márquez, en la ciudad de Bell Ville, cuya tirada abarca desde 1930 a 1940. Es a partir de aquí que se empieza a definir el desarrollo del Movimiento Obrero bellvillense.
[4]Parte de esta etapa del movimiento obrero fue reconstruida a través de la historia oral y apelando a la memoria de los entrevistados, en el marco del proceso de reconstrucción de relatos y representaciones del pasado reciente.
[5]Francisco Eduardo Arguello. Consejero de la delegación Bell Ville de la CGT Regional Villa María en 1975, colaborador en la asesoría Bell Ville de la U.O.M. Seccional Leones. Presidente de la CGT Regional Bell VIlle 2014.
[6]Diario Tribuna. “Formarían la CGT en Bell Ville”. Bell Ville. miércoles 3 de febrero de 1982.
[7]Piacenza Roberto. Jubilado de Epec y ex Secretario Gremial de Luz y Fuerza de Bell Ville
[8] La ley del Telegrama Obrero, garantizaba un trámite gratuito y sin dilación para los trabajadores activos e inactivos en conflicto con sus empleadores o ex empleadores.
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